22 de Abril. El día de la Tierra
El color no solo responderá a narrativas emocionales de belleza, sino a una elección consciente para reducir nuestro impacto ambiental en el entorno natural.
Durante más de una década, nos hemos dedicado fervientemente a la exploración y utilización de pigmentos naturales con el fin de mitigar el impacto ambiental en el teñido artesanal, al mismo tiempo que buscamos innovar en el desarrollo de tonalidades únicas. Además, hemos reflexionado sobre cómo el color se ha convertido en un vehículo para desafiar los estándares de belleza, especialmente en un contexto donde los tonos neutros dominan gran parte del sector de diseño de lujo en México y en la cultura occidental.
En la actualidad, la escasez de lluvias en Oaxaca está generando un impacto devastador en la región, afectando directamente la cría y el cultivo de pigmentos naturales.Por este motivo, hemos tomado la decisión de suspender temporalmente la utilización de ciertos pigmentos naturales en nuestros procesos de teñido, especialmente la grana cochinilla, debido al riesgo que enfrenta su producción ante la falta de pencas de nopal.
Es fundamental desmitificar la creencia generalizada de que las plantas cactáceas, como el nopal, no requieren agua. Aunque es cierto que estas plantas tienen necesidades hídricas más bajas en comparación con otros cultivos, como el maíz o los frijoles, un suministro adecuado de agua es crucial para su óptimo desarrollo y crecimiento, especialmente en plantaciones con especificaciones técnicas.
Esta escasez de recursos también ha provocado un aumento significativo en los costos y la disponibilidad local de materia prima y pigmentos, impactando tanto a los agricultores como a los artesanos tintoreros. Nos encontramos en un nuevo ciclo marcado por desafíos enormes, donde el color no solo responde a narrativas emocionales de belleza, sino que también se convierte en una elección consciente para reducir nuestro impacto ambiental en el entorno natural.
Por esta razón, hemos decidido revisitar nuestra primera colección, "Baacanda, rojo para el corazón", que se ha convertido en una de las líneas más emblemáticas de nuestro proyecto. Esta colección fue el punto de partida de nuestra reflexión sobre multiculturalidad y estética. Creemos que es crucial que esta reflexión evolucione para que nuestro trabajo como diseñadores se alinee con las necesidades actuales de nuestros aliados artesanos, la comunidad y el ecosistema.
Por lo tanto, algunas de nuestras colecciones serán lanzadas como ediciones de temporada, teñidas con los pigmentos disponibles según la temporada de lluvias y la disponibilidad temporal de los recursos.
Esperamos que este cambio sirva como un llamado a la reflexión para nuestra comunidad y clientes sobre cómo la producción de objetos impacta nuestro planeta. Aunque ofrecer colores por temporada representa un desafío para nuestro atelier especializado en servicios personalizados, consideramos que el cuidado de nuestra tierra es una prioridad urgente y que no podemos permitirnos perder más tiempo.
